Se disputó la más importante competición bajo techo en Doha. En la capital del emirato Qatarí tuvo lugar el Campeonato del Mundo de Pista Cubierta. Esta gran cita, la más importante atléticamente en todo este año 2010, ya que al aire libre le corresponderá el turno al europeo, tomó parte una de nuestras atletas del Piélagos Inelecma. Difícil contar con representación en este tipo de eventos, máxime con la escasa selección con la que concurrió la RFEA a dicho campeonato. Pero nuestra atleta más internacional, Ruth Beitia, es asidua ya desde hace años a equipo nacional.
La cántabra pasó con solvencia la inevitable calificación previa a la final. Aquí se nota la templanza alcanzada por Ruth en los últimos años, ya que no duda y no tiene el mínimo problema en conseguir su pase a las finales en cuantos campeonatos participa.
Ruth comenzó de la mejor manera posible, sin fallo, al menos hasta 1,92. Pero no pudo continuar así en 1,94 y 1,96 alturas donde cometió sendos nulos en sus primeros intentos. Cuando se llegó al 1,98 la atleta del Piélagos Inelecma ocupaba la cuarta plaza. Pero fue aquí donde la cántabra presentó sus credenciales de ser una de las líderes del ranking mundial en esta temporada bajo techo. Flanqueó el listo sobre 1,98 en su primer intento, lo que dejo en una posición muy comprometida al resto de tus rivales, que hasta el momento la tomaban cierta ventaja. De hecho la rusa Shkolina no pudo con esta altura y quedó eliminada, no así la estadounidense Howard quien si lo superó, pero no en el primer intento. Ya con solo tres atletas en competición y el listón sobre 2,00 metros, únicamente Blanca Vlasic pudo con esa altura. En el empate sobre 1,98 metros venció la española, por su salto valido en el primer intento, sobre la americana. Con lo cual la cántabra se alzó con el sub-campeonato del mundo gracias esta medalla de plata, mejorando su bronce de Moscú de 2006. Pero esta vez si, Beitia disfrutó de su logró con todos los honores, en el estadio y ante el público, ya que en 2006 al finalizar la competición fue 4ª y posteriormente, debido a un positivo en el control antidoping de una de sus rivales, se le concedió la medalla.
Pero si para Ruth fue emocionante la ceremonia de entrega y subir al pódium, no lo fue menos en su llegada a casa. Cuando su avión de regreso aterrizó en el aeropuerto de Parayas la esperaban más de 50 alumnos de la Escuela de Atletismo del Ayuntamiento de Piélagos, así como numerosos familiares y amigos. Este recibimiento, emocionó a la sub-campeona del mundo, quien estuvo por espacio de más de 45 minutos firmando autógrafos y fotografiándose con los pequeños y el numeroso público asistente. Todos estos chicos pudieron asistir gracias a la coordinación de Fidel, Jose y Carmen, quienes fueron los artífices de este gran recibimiento. Con este pequeño gesto se demostró una vez más que aparte de un gran club el Piélagos Inelecma es una gran familia.
La cántabra pasó con solvencia la inevitable calificación previa a la final. Aquí se nota la templanza alcanzada por Ruth en los últimos años, ya que no duda y no tiene el mínimo problema en conseguir su pase a las finales en cuantos campeonatos participa.
Ruth comenzó de la mejor manera posible, sin fallo, al menos hasta 1,92. Pero no pudo continuar así en 1,94 y 1,96 alturas donde cometió sendos nulos en sus primeros intentos. Cuando se llegó al 1,98 la atleta del Piélagos Inelecma ocupaba la cuarta plaza. Pero fue aquí donde la cántabra presentó sus credenciales de ser una de las líderes del ranking mundial en esta temporada bajo techo. Flanqueó el listo sobre 1,98 en su primer intento, lo que dejo en una posición muy comprometida al resto de tus rivales, que hasta el momento la tomaban cierta ventaja. De hecho la rusa Shkolina no pudo con esta altura y quedó eliminada, no así la estadounidense Howard quien si lo superó, pero no en el primer intento. Ya con solo tres atletas en competición y el listón sobre 2,00 metros, únicamente Blanca Vlasic pudo con esa altura. En el empate sobre 1,98 metros venció la española, por su salto valido en el primer intento, sobre la americana. Con lo cual la cántabra se alzó con el sub-campeonato del mundo gracias esta medalla de plata, mejorando su bronce de Moscú de 2006. Pero esta vez si, Beitia disfrutó de su logró con todos los honores, en el estadio y ante el público, ya que en 2006 al finalizar la competición fue 4ª y posteriormente, debido a un positivo en el control antidoping de una de sus rivales, se le concedió la medalla.
Pero si para Ruth fue emocionante la ceremonia de entrega y subir al pódium, no lo fue menos en su llegada a casa. Cuando su avión de regreso aterrizó en el aeropuerto de Parayas la esperaban más de 50 alumnos de la Escuela de Atletismo del Ayuntamiento de Piélagos, así como numerosos familiares y amigos. Este recibimiento, emocionó a la sub-campeona del mundo, quien estuvo por espacio de más de 45 minutos firmando autógrafos y fotografiándose con los pequeños y el numeroso público asistente. Todos estos chicos pudieron asistir gracias a la coordinación de Fidel, Jose y Carmen, quienes fueron los artífices de este gran recibimiento. Con este pequeño gesto se demostró una vez más que aparte de un gran club el Piélagos Inelecma es una gran familia.
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